El fin de semana empezó aguado. Y es que las lluvias torrenciales en Corea, según palabras posteriormente probadas del señor Hahn, duran tres días; en nuestro caso precisamente Viernes, Sábado y Domingo, rompiéndonos cualquier plan de turismo que tuviéramos pensado. Aún así, el fin de semana acabó cundiendo.

Viernes noche
Baduk English class y Joan se compra un paraguas.

Sábado
Museo Nacional de Corea y Kyobo Library (donde compramos entre los tres 40 libros). Joan hace piruetas con el paraguas y adquiere un dominio de abrirlo en el aire admirable.

Domingo
Nos despertamos a las 10, desayunamos y cogemos una horita de metro para llegar a casa del señor Hahn, donde nos habían invitado a comer junto con Lee Hajin 3p. Al final resultó que habían invitado también a un australiano que está estudiando baduk en otra escuela y a algún alumno más de la Baduk English class. Después de pasearnos por medio barrio para encontrar un sitio abierto en Domingo, sin resultado, volvimos al mismo edificio del que salimos, para comer en el restaurante del primer piso.

Una vez superado el trámite de llenar el estómago, Hahn propuso a Hajin jugar unas partidas con nosotros, a lo que por supuesto aceptamos encantados. Nos dio 5 piedras a Joan y Pascu y 6 a Julio, siendo Pascu el único que consiguió ganar. La verdad es que le coges gusto a recibir 5 piedras y ser rapapolveado.

Pero no solo nos dedicamos a jugar, también nos comentó que salvo contratiempos iría al congreso la semana que viene, y que está estudiando la carrera de empresariales. Es interesante ver cómo el hecho de ser profesional solo es una parte de su vida, y no son absorbidos totalmente por el baduk, como nos pasa a algunos amateurs.

Joan se deja el paraguas en el metro. Por suerte, los 3 días han concluido y ya no llueve.