Un día en el metro, Joan y Pascu iban mirando un libro de problemas típicos de esquina. Yo iba pensando en mis cosas, hasta que me indujeron a resolver alguno de los problemas. La sorpresa fue que los iba resolviendo todos al instante, porque yo ya me los sabía de memoria; al poco decidieron seguir por su cuenta. Los problemas eran como los del diagrama: en cada esquina hay uno diferente (independientes), y en cada uno negro juega y vive.

Eso me recordó un aspecto curioso de las escuelas de baduk para niños en Corea. Los niños tienen su libro de problemas a resolver, y rara vez juegan entre ellos. Así que un niño coreano 10 kyu es capaz de resolver al instante estos problemas sencillos, porque ya los tiene asimilados. Cosa que un 3 dan europeo parece que no.

Esta es una de las grandes diferencias entre oriente y occidente. En Corea primero aprenden lo básico, y luego juegan. En Europa jugamos, y luego a veces aprendemos alguna cosa básica. He visto danes europeos fallando en problemas sencillos, es más, he visto kyus medios ¡fallando nakades! (verídico).

Así que tiene sentido empezar una serie de artículos sobre la vida y muerte básica. No se puede ir a la guerra sin saber usar el fusil.