La respuesta correcta al cepo empieza por generar puntos de corte, con blanco en 2 y 4. A continuación, para evitar que negro juegue en A, es muy importante defender la posición jugando en 6, un bonito punto de simetría. Con esto, negro queda con numerosos cortes que cuidar.
La continuación muestra el resultado final, en el que (cito textualmente) «parece buena la resonancia entre el territorio de blanco y la influencia de negro«. Negro acaba en sente, con lo que puede empezar a usar su influencia directamente. Blanco se ha quedado con la esquina, y al final del juego tiene la opción de saltar en A. Nótese que el corte en B no caza la piedra cortada, por lo que sería prematuro jugarlo sin ayuda por arriba, y en todo caso negro siempre podría decidir abandonar la piedra.
En el hamete de forma similar que comentamos en la entrada anterior, blanco ya tiene la piedra marcada en el sitio correcto, con lo que puede ir a presionar con 4 y 6. Después es muy importante cortar en 8, para evitar negro en B. Al final el resultado es bueno para blanco, que acaba en sente y además podrá explotar en el futuro la debilidad en A.